Estructura del texto expositivo
Uno de los elementos que hay que tener en cuenta al momento de leer un texto es su estructura, pues ello permite comprenderlo mejor, así como identificar la información. Como en todo texto formal, si se trata de uno expositivo, cuenta con introducción, desarrollo y conclusión. Cada una de estas partes debe estar organizada y jerarquizada. De acuerdo con Álvarez y Ramírez (2010), se pueden entender de la siguiente forma:
- Introducción: muestra el tema sobre el cual versa el texto, sus antecedentes y su contexto. Se trata de contestar a las preguntas: ¿qué?, ¿por qué?, ¿cómo?
- Desarrollo: presenta la explicación completa del tema y los subtemas. Se trata de una fase de resolución en la que puedes utilizar las siguientes expresiones: porque…, es…, está compuesto de…, se presenta como…
- Conclusión: cierra la exposición, resaltando los principales aspectos desarrollados. Se trata de la fase de evaluación, expresada con las siguientes frases: así pues…, como conclusión…, en resumen…, en síntesis… (pp. 79-80).
La función que cumplen estas partes es organizar el texto y darle claridad a la información. La estructura es, por así decirlo, el molde en el que se acomoda el texto.
